
La jornada inaugural --día 26, 12.00 horas, Auditorio de Carlos V-- estará presidida por Nava Castro, secretaria xeral de Turismo de la Xunta de Galicia, y los ponentes serán María del Carmen Saavedra Vázquez, profesora titular de Historia Moderna de la Universidad de Santiago (USC), Luis García Zurdo, maestro vitralista, y José Antonio Castiñeira Chouza, ministro provincial. Posteriormente habrá un aperitivo (13.30 horas) en el Patio de Cristal.
Durante estos días se podrá visitar con guía el convento de Santiago y sus dependencias, con explicaciones sobre el trabajo que realizan hoy los franciscanos. En el convento que el santo de Asís fundó en Santiago hace ocho siglos hay un museo de Tierra Santa único en el mundo, un hotel de cuatro estrellas para turistas y un albergue para sintechos. Las ganancias de uno recaen en el otro.
Pero hay más: una biblioteca con 80.000 volúmenes, setenta incunables. El archivo de la Provincia Franciscana de Santiago. Y huerta. Y auditorio. Pero sobre todo es albergue de acogida nocturna, diurna y vespertina. Albergue veinticuatro horas con ropero, banco de alimentos, orientación laboral, servicio médico, de abogados, cursos de formación. Café con leche caliente. Más de mil personas atendidas cada año.
En la actualidad hay once monjes que mantienen vivos los 44.000 metros cuadrados de granito franciscano habitables y en pleno uso y distribuidos en siete plantas. No hay ni un solo rincón del convento que esté abandonado, aunque en otros tiempos más gloriosos aquí hubo más de cien frailes.
Donde en 1520 el emperador Carlos I de España y V de Alemania reunió Cortes hoy se celebran conferencias y otros eventos. Donde los monjes paseaban en su vida de clausura, hoy se celebran banquetes. Y se sirven en su época los pimientos de Padrón, que fueron traídos a España desde América por los franciscanos del cercano convento de Herbón.
En la sala Giotto es donde mejor se observan los restos arqueológicos de la primitiva capilla, la que —dicen— fundó el santo de Asís hacia 1214. Junto a ella, la tumba de Cotolay, el mecenas de la primera construcción. Carbonero en la falda del Monte Pedroso para unos y regidor de la ciudad y hombre pudiente para otros. No es de extrañar la leyenda: la propia ciudad de Santiago de Compostela es una inventio.
(Para asistir al acto inaugural del día 26 es preciso confirmar la asistencia antes del 25 de marzo al correo hotel@sanfranciscohm.com o al teléfono 981 581 634).